El Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) ha comenzado a repartir más de 13.000 mascarillas y otro material sanitario de protección personal procedente de diferentes administraciones, entidades y particulares. El IMAS, que es quien gestiona todo este material, lo está haciendo llegar tantos a los servicios sociales municipales y otras residencias y centros tanto municipales como concertados o privados, así como a sus residencias y centros propios.
En este sentido el Govern Balear ha proporcionado al IMAS 8.000 mascarillas, de las que 3.800 son para los centros y servicios sociales de todos los ayuntamientos de la isla, mientras que el resto de mascarillas se han distribuido entre las residencias de Gent Gran, las de personas con Discapacidad, centros de menores o albergues para personas sin hogar del IMAS.
La intención de la institución insular es que ningún municipio quede sin el material de protección sanitario necesario. En este sentido también se han repartido entre diferentes centros municipales, privados y propios del IMAS 50.000 guantes, 400 batas desechables y mascarillas quirúrgicas dadas por la Universidad de las Islas Baleares (UIB) y procedentes de los laboratorios del centro universitario.
Por su parte otras asociaciones como la ACHINIB, Asociación China de las Islas Baleares o la asociación Moda Mallorca han dado otros 4.000 mascarillas, que también se han repartido entre los diferentes centros y servicios. Además, diferentes particulares también nos han hecho llegar una serie de mascarillas hechas a mano, como es el caso de las auxiliares de enfermería de la residencia de Felanitx, que junto con un grupo de costureras de San Lorenzo han elaborado otros 1.000 .
Desde el IMAS se intenta que ningún centro de Mallorca que lo necesite se quede sin material de protección aunque es una situación generalizada a nivel nacional dada la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus. A medida que va llegando este material, se hace llegar a los centros que lo necesitan y está previsto que en los próximos días continúe.
El servicio cuenta con 65 plazas concertadas con el IMAS destinadas a fomentar la autonomía personal y la inclusión social de las personas con discapacidad
Representantes de la institución insular visitan la residencia de Son Caulelles para valorar el impacto directo del convenio con el Govern en la calidad de vida de las personas mayores dependientes
El presidente Llorenç Galmés ha participado en esta jornada de convivencia, creatividad y música, que ha reunido a los siete centros de la red y ha reconocido el papel de los CPAP en la promoción de un envejecimiento activo.
El presidente Galmés ha defendido durante la inauguración un modelo que garantice el bienestar, las oportunidades y una atención integral para todos los niños, niñas y adolescentes de la isla
Un encuentro pionero que, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, ha dado protagonismo a los testimonios y a los recursos que impulsan una Mallorca más accesible
El programa llegará a las más de 3.200 personas mayores de 65 años que son usuarias de alguno de los siete centros de promoción de la autonomía personal del Consell de Mallorca.
El presidente Galmés ha visitado las obras, que avanzan a buen ritmo, y supondrán la creación de 52 plazas adaptadas al nuevo modelo de atención centrada en la persona, además de mejorar la accesibilidad y la sostenibilidad del edificio.
El presupuesto del área crece un 7,4 % y consolida la reforma de centros, la apertura de nuevos servicios y el apoyo a los ayuntamientos.
El Consell cede el Teatro Principal para la celebración de este concierto solidario, que permitirá invitar a niños en situación de vulnerabilidad a través del IMAS
El plan incorpora mejoras en los centros, refuerzo de plazas de emergencia e inicia el primer programa específico para jóvenes de 18 a 25 años en situación de calle.
Reflexionar sobre como la sociedad puede contribuir a la recuperación de las víctimas y dar respuesta a sus necesidades ha sido el objetivo principal del encuentro
El presidente del IMAS y conseller de Benestar Social, Guillermo Sánchez, destaca que envejecer en buenas condiciones «debe dejar de ser una excepción para convertirse en un derecho universal».