Cerca de 40 personas han participado durante estos dos meses de verano de las sesiones de terapia acuática organizadas por el departamento de fisioterapia de la Llar d’Ancians Hogar en la piscina de esta residencia dependiente del Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS). La directora insular de Atención a la Dependencia, Beatriz Gamundí, se ha desplazado hasta la Llar para presenciar una de esas sesiones.
Las sesiones, que han tenido lugar todos los martes y jueves de julio y agosto, han contado con una gran aceptación por parte de los residentes del centro y por los residentes de la barriada palmesana donde se ubica, ya que se trata de una actividad abierta a personas de fuera de la residencia. En este sentido, Gamundí ha querido destacar que «más allá de los beneficios de la terapia acuática, esta actividad tiene un valor añadido ya que permite la integración de los residentes dentro de su entorno, fomentando así su capacidad de socialización y sus habilidades sociales» .
Tal y como ha explicado Iván Petrov, responsable del departamento de fisioterapia de la Llar, se han llevado a cabo dos tipos diferentes de sesiones dirigidas por el personal de este departamento. Por un lado, una sesión muy parecida al aquagym, que tiene como principal objetivo ejercitar la libertad de movimiento y la dinamización, y por otro lado un tipo de sesión más técnica donde el objetivo es la mejora de la coordinación, la propiocepción y la activación muscular. Ambas sesiones prestan también atención a la correcta respiración y la disminución del dolor tensional.
Entre los beneficios de la terapia acuática en personas mayores destacan el mantenimiento de la fuerza muscular, la resistencia y la función respiratoria; el aumento de la amplitud de movimiento y de la calidad de vida, así como la disminución del cansancio y los niveles de depresión o ansiedad.
Además de la visita a la Llar d’Ancians, Gamundí se ha desplazado también hasta la Llar Avenida Argentina de Palma y la Llar de Llucmajor, para conocer el personal y el funcionamiento de estos centros.
El servicio cuenta con 65 plazas concertadas con el IMAS destinadas a fomentar la autonomía personal y la inclusión social de las personas con discapacidad
Representantes de la institución insular visitan la residencia de Son Caulelles para valorar el impacto directo del convenio con el Govern en la calidad de vida de las personas mayores dependientes
El presidente Llorenç Galmés ha participado en esta jornada de convivencia, creatividad y música, que ha reunido a los siete centros de la red y ha reconocido el papel de los CPAP en la promoción de un envejecimiento activo.
El presidente Galmés ha defendido durante la inauguración un modelo que garantice el bienestar, las oportunidades y una atención integral para todos los niños, niñas y adolescentes de la isla
Un encuentro pionero que, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, ha dado protagonismo a los testimonios y a los recursos que impulsan una Mallorca más accesible
El programa llegará a las más de 3.200 personas mayores de 65 años que son usuarias de alguno de los siete centros de promoción de la autonomía personal del Consell de Mallorca.
El presidente Galmés ha visitado las obras, que avanzan a buen ritmo, y supondrán la creación de 52 plazas adaptadas al nuevo modelo de atención centrada en la persona, además de mejorar la accesibilidad y la sostenibilidad del edificio.
El presupuesto del área crece un 7,4 % y consolida la reforma de centros, la apertura de nuevos servicios y el apoyo a los ayuntamientos.
El Consell cede el Teatro Principal para la celebración de este concierto solidario, que permitirá invitar a niños en situación de vulnerabilidad a través del IMAS
El plan incorpora mejoras en los centros, refuerzo de plazas de emergencia e inicia el primer programa específico para jóvenes de 18 a 25 años en situación de calle.
Reflexionar sobre como la sociedad puede contribuir a la recuperación de las víctimas y dar respuesta a sus necesidades ha sido el objetivo principal del encuentro
El presidente del IMAS y conseller de Benestar Social, Guillermo Sánchez, destaca que envejecer en buenas condiciones «debe dejar de ser una excepción para convertirse en un derecho universal».